Enseñar no es solo explicar.
A veces, cuando hablamos de innovación educativa y metodologías activas, parece que estuviéramos descubriendo América. Pero lo cierto es que, más allá de las modas y etiquetas, hay algo profundamente humano en querer aprender con sentido. Y si echo la vista atrás, creo que esto es lo que siempre nos faltó en el aula: sentido . Durante años, mi vida escolar se ha desarrollado entre clases donde el profesor hablaba, nosotros escuchábamos (más o menos), y luego venía el examen. Aprendí mucho, claro. Pero también olvidé rápido. Porque cuando el aprendizaje se reduce a memorizar, el contenido se te olvida en cuanto haces el examen. Recuerdo perfectamente esa sensación de estudiar “por obligación”, de pensar que levantar la mano era arriesgarse al ridículo, y que las preguntas solo servían para ver si habías fallado. Nunca para pensar. Hoy veo con otros ojos todo lo que no pasó en esas aulas. Nadie nos propuso resolver un reto real. Nunca trabajamos en proyectos que importaran. ...